La mentira no es noticia
La novedad es uno de los ingredientes principales de la noticia. Que Trump mienta ya no es novedoso, ya no es noticia. Sin embargo, sigue ocupando espacio en los medios, que han decidido tirar definitivamente la toalla a la hora de fijar la agenda informativa para dedicarse en gran medida a tratar aquellos temas sobre los que miente Trump. Bueno, Trump o cualquier político lo suficientemente listo como para aplicar el mismo truco.
Desmentir una mentira obvia a los pocos lectores informados que siguen siendo fieles seguidores de la actualidad publicada no es más que asumir el tema propuesto por el mentiroso. A sus seguidores el llamado fact checking, algo supuestamente innato en el trabajo periodístico, les da igual. Probablemente eran millones los estadounidenses que no pensaban que Trump fuera capaz de construir un muro, pero le votaron por sacar a primera plana el tema de la inmigración.
Está muy bien eso de comprobar las fuentes y los datos, pero se trata de un proceso previo ineludible. Convertirlo en algo extraordinario y reactivo es un gol más en propia meta de la profesión. Hay que salir más a la calle, escuchar y anticipar los temas que interesan a los lectores, no a los mentirosos. Ya lo decía Mulder, la verdad está ahí fuera.